viernes, 20 de diciembre de 2013

Ciencia ficción para el 2014 (I)


Remake de RoboCop y otra secuela de Transformers.
Voy a realizar una serie de artículos, adelantando información de algunas películas de ciencia ficción, que ahora mismo están en producción y que tienen previsto entrenarse en el año 2014. En la primera tanda de análisis tenemos dos títulos; un remake y una (otra) secuela, ambos sobre robots, o siendo más puritanos: sobre un policia cyborg con complejo de justiciero y una caterva de alienígenas mecanizados e infantiloides.

Robocop (2014)


La primera película de la voy a hablar es la nueva versión de Robocop (2014), dirigida por Jose Padilha y basada en el original de Paul Verhoven del año 1987. Tiene previsto entrenarse el 14 de Febrero de 2014. La novedosa estética y el planteamiento futurista y decadente de la primera cinta, animó a los estudios a producir una mirriada de secuelas, a cada cual más alejada de las ideas originales que dieron sentido a la película original. Los nuevos filmes se centraban en ofrecer nuevos "villanos" a los que tenía que enfrentarse Robocop, en una espiral problemática, parecida a que sufren las películas de superhéroes actuales. La denuncia social quedó relegada y la sátira propia del primer director -el holandés Verhoven- desestimada. Parece que ocurrirá lo propio con la nueva adaptación. El remake de 2014 se presenta como un edulcorado espectáculo de efectos especiales, tendente a olvidar la ironía con la que se presentaba la original, y negándose a realizar cualquier ataque vedado al statu quo. Modernizar el asunto con drones es un detalle baladí.


Parece que se centrará en la conmoción de un hombre asesinado, que mediante tecnología consigue ¿superpoderes? con los que impartir justicia. ¿Dónde quedará la distopía sobre Ciudad Delta y el poder omnímodo de las grandes corporaciones que pactan con delincuentes? ¿Se hablará del proceso de privatización agresivo (les suena), con el que acaban asumiendo el control del uso legítimo de la fuerza: siendo la policía, simples asalariados de la multinacional OCP? ¿Tratarán el tema de la depauperización de los medios de comunicación? ¿O todo quedará en mero espectáculo de efectos especiales mejorados (si bien el maquillaje de la primera película resiste el paso del tiempo), adaptados al público de ahora y apelando, asimismo, a los nostálgicos del cine ochentero? Tendremos que conformarnos con la ristra de actores de renombre (típica estrategia de Hollywood), tales como Gary Oldman, Michael Keaton o Samuel L. Jackson.


En cualquier caso, resulta curioso que imaginen el Detroit del futuro como la Castellana madrileña. Véase el póster promocional.


Transformes: la Era de la Extinción (2014)

Por otro lado, otro título de ciencia ficción que viene (se nos viene encima) el próximo año es Transformes: la Era de la Extinción, prevista para el 8 de Agosto de 2014. Cuarta película del ansias de Michael Bay sobre estos robots del espacio, que se convierten prácticamente en cualquier cosa, prefiriendo, eso sí, los últimos modelos automovilísticos de la industria norteamericana, a ser posible. El Megatron-revolver-gigante le parecerá demasiado ridículo. Imagino que el product placement pagará la mitad de película, que se va en contratar estrellas de Hollywood y en quintales de material explosivo (en parte para reventar el propio product placement). No se mucho del argumento. Poco importa. Al cabo de tres minutos, lo que tarda en ponerte en situación la imponente voz de Optimus Prime, la cosa derivará en una interminable sucesión de escenas apocalípticas, en donde todo explota al paso de estos gigantescos y poco cuidadosos transformers. Fin.


Bueno... venga, analicemos algo más... La presa rosa sobre las desavenencias de Bay con los actores originales de la saga -véase la actriz Megan Fox, o el actor Shia LaBeouf-, me interesan más bien poco; pero quisiera apuntar que el cambio (obligado o no por circunstancias personales y no de guión) de los actores introduce un nuevo argumento. En este caso, parece que se centrará en la misión del padre de familia, interpretado por Mark Wahlberg, de mantener a salvo a su hija (Nicola Peltz) y a su novio (Jack Reynor), de los peligros que amenazan la paz mundial (nótese tono irónico, por favor). Típico argumento hollywodiense, pero bueno, nos alejamos un poco (solo un poco) de los adolescentes con picores de las primeras entregas, que ya olían a rancio. Por lo demás, muchas explosiones para los amantes de ver muchas explosiones. Y en mi caso, mucho mareo al salir de la sala, que nunca consigo entender la anatomía de los indígenas de Cybertron. Sin saber distinguir el culo de la cabeza, vaya...



martes, 10 de diciembre de 2013

Estreno: El Hobbit: La Desolación de Smaug



El próximo viernes 13 de diciembre se estrena "El Hobbit: La Desolación de Smaug" (2013). La segunda entrega de la trilogía ideada por Peter Jackson, basada en la novela de J.R.R. Tolkien, que mostrará la continuación de la aventura de Bilbo Bolsón (Martin Freeman) -cada vez más consciente de su papel de héroe-, junto a la compañía de enanos liderada por Thorin Escudo de Roble (Richard Armitage) y el mago Gandalf (Ian McKellen). El viaje hacia la Montaña Solitaria, antiguo reino enano de Erebor usurpado por el Dragón Smaug, les llevará a través de los parajes agrestes de las Tierras Salvajes, conocerán a Beorn (Mikael Persbrandt), un humano con un espíritu animal, atravesarán el Bosque Negro, poblada de maliciosas criaturas, y conocerán el reino cavernoso de los elfos silvanos. Verán a su rey Thranduil (Lee Pace) y a su hijo Legolas (Orlando Bloom), que ya apareciera en el Señor de los Anillos, junto a un personaje inventado para las películas: Tauriel (Evangeline Lilly). Por lo que se ha podido ver en las imágenes de los trailers, llegarán hasta la Ciudad del Lago, donde conocerán a Bardo (Luke Evans) y finalmente arribando hasta la Montaña Solitaria, donde se verán las caras con Smaug (cuya voz en la versión original la pone Benedict Cumberbatch), en una versión "monstruosa" del antagonismo dialéctico entre Gollum y Bilbo, que se pudo ver en la anterior película. Parece que dejaran la Batalla de los Cinco Ejércitos para la tercera entrega, "El Hobbit: Partida y Regreso" (2014), que se augura apoteósica.


La versión cinematográfica de Peter Jackson, alarga la narración de El Hobbit de Tolkien, recreándose en todos los detalles de la historia, añadiendo escenas más épicas y que duran bastante (quizá de forma excesiva en algunos casos), introduciendo tramas secundarias que complementan el contexto mitológico de la Tierra Media, así como presentado a personajes desconocidos para los fans, que dotan al metraje de elementos novedosos. La división en tres películas obedece a la necesidad de tiempo para introducirlo todo, además de ser un plan con visos a adquirir pingues beneficios, al retrasar los estrenos de año en año y en periodo navideño; no en vano, la nueva trilogía ya ha superado en costes de la anterior de "El Señor de los Anillos". Otra novedad consiste en el sistema de filmación a 48 fotogramas por segundo, en alta calidad digital y en 3D, lo que llaman 3D HFR 48 fps... ¿sacacuartos a la vista?


Uno de los aspectos fuertes de la producción es la afinidad visual de "El Hobbit...", con las películas de la trilogía de "El Señor de los Anillos", que ayuda a establecer un discurso continuador, o en este caso, anterior, de la trama. A en mi en particular, me hubiera gustado ver el planteamiento de Gillermo del Toro, que hubiera sido muy diferente, obligando, quizá, a una mayoría a rasgarse las vestiduras, por la pérdida de relación formal con la trilogía de "El Señor de los Anillos" de Jackson. Si bien la originalidad de del Toro siempre ha llamado la atención y hubiera podido ser toda una revelación. Nunca lo sabremos. Conformémonos con la nueva entrega de una aventura épica de fantasía, entretenida (larga quizá) y con una refinada puesta en escena, que asegura en buen espectáculo. Deseando ver en condiciones al gusano Smaug.


Aquí tienen el trailer para relajar la angustia: